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Noemí Richardson, la Muñeca Negra de Las Tunas

Noemí Richardson, la Muñeca Negra de Las Tunas

Noemí Richardson Cruz conjuga poesía, danza y futuro

 

Joel Lachataignerais Popa, jlpopa@enet.cu  joecklouis@jmail.com 

 

Tendría apenas tres años de edad cuando la conocimos. Era una preciosa niña de negra y firme piel, con ojos almendrados y sonrisa vespertina. Como su parecido era tal, le nominamos como el personaje de la Edad de Oro: La Muñeca Negra. Ahora la volvemos a ver, pero ya próxima a 14 años de edad.

Como cada familia cubana, la de Noemí Richardson Cruz, conjuga los esfuerzos de hogar y escuela, igual que muchos jóvenes cubanos que, por estos días avanzan en planes vacacionales de diversas dimensiones. Detrás  quedan las aulas y sucesos que en el futuro serán gratos recuerdos de vida.

Noemí de la Caridad Richardson Cruz, es una bella adolescente que recordamos con el rostro que nos hizo ver en ella el cuento “La muñeca negra”, de la Edad de Oro de José Martí, cuando era una bebe atrevida y parlante, de manos de su abuelita tunera, a quien visita cada año de vuelta de La Habana Vieja.

Ahora tiene 13 años. Y como siempre ha tenido sus líneas de inspiración, aún los libros son su fascinación, la música, el baile y la poesía.

Pertenece a un proyecto cultural en La Habana Vieja, que cuenta con el apoyo de la Oficina del historiador de La Habana, el Dr. Eusebio Leal Splenger, y asiste a los talleres de literatura y poesía de la Casa de la Poesía en esa localidad, donde es guiada por Isis Leyva.

Noemí ha concluido el curso escolar 2013-2014, con un aprovechamiento de 96,05 puntos, con notas sobresalientes en matemática, español, química, Historia de Cuba, Educación Física y otras asignaturas, para concluir felizmente el octavo grado.

Noemí es el ejemplo de muchas niñas, cuyos padres le enseñan en el espejo de la vida las realidades que brindan la responsabilidad y el tesoro de saber.

Dos esencias se recogen ya de la adolescente en su avance arrollador hacia el futuro: La poesía y la danza.

En la foto, la vemos cual bailarina española abanicada en el entablado, y editorial Samandar, de la Casa de la Poesía, que cuenta con el apoyo y asesoría de la UNICEF y de la UNESCO, publicó su poema Puedes fingir, que fue premio en un concurso.

Este 2014, “La Edad de Oro”, cumple 125 años… Ella, Noemí Richardson Cruz, aunque con sólo 13,  es –para nosotros-  “La Muñeca Negra”, escapada de las historias de José Martí.

El estudiante José Marti Pérez

El estudiante José Marti Pérez

El estudiante José Marti Pérez, medalla en pecho

 

Joel Lachataignerais Popa  jlpopa@enet.cu  joecklouis@gmail.com

 

Cuando del Héroe Nacional de Cuba se trata, entre los temas que los jóvenes solicitan se encuentra el de “Martí estudiante”. Ya se sabe, porque siempre que se habla del Apóstol de Cuba se dice, que Martí era un estudioso empedernido, capaz de sacrificar cualquier acción de beneficio personal a favor de alcanzar un nuevo conocimiento. De hecho, fue autodidacto, lo cual confirma lo antes dicho.

A propósito de que este 2014 se cumplen 140 años de que José Martí alcanza sus títulos universitarios, pasaremos revista a esa conducta que sienta la impronta del joven cubano forjador de la patria, quien se ve precisado a dejar las aulas y se convierte en autodidacto.

Se estima que aprendió a leer y a escribir en Valencia y se sabe que en el mes de junio de 1859 aparecía matriculado en una escuelita de barrio, un año más tarde recibe clases en el colegio San anacleto, dirigido por Rafael Sixto Casado, quien perfecciona sus conocimientos infantiles de lectura y escritura, fundamentalmente.

En marzo de 1865 ( [1] ) ingresa en la Escuela de Instrucción Primaria Superior Municipal de Varones que dirige Rafael María de Mendive, quien fue el máximo tutor de su vida estudiantil y el 27 de Septiembre de 1866 es admitido en el Instituto de Segunda Enseñanza de La Habana.

José Martí matricula como alumno de la Escuela Profesional de Pintura y Escultura de La habana, conocida como “San Alejandro” el 15 de Septiembre de 1867 y es dado de baja el 31 de octubre de ese mismo año, pero aparece como alumno de bachillerato del colegio San Pablo, que dirige Rafael Maria de Mendive, hasta que fue clausurada la institución por las autoridades colonialistas de España el 23 de marzo de 1869.

Después de ese acontecimiento Martí deja de asistir a clases en La Habana y reanuda sus estudios pero en condición de autodidacto. Es desterrado a España, por primera vez y a partir de mayo 31 de 1871, se convierte en estudiante de la Facultad de Derecho de la Universidad Central de Madrid, de donde se traslada el 17 de mayo de 1873 para la Universidad Literaria de Zaragoza, pero es un estudiante no presencial.

Once días más tarde solicita autorización de exámenes al Rector  de esa Universidad y el 30 de agosto, se dirige al director del Instituto de Zaragoza, con el fin de examinar las asignaturas que le faltaban para terminar el bachillerato.

El año de 1874 es profuso en lides estudiantiles para el joven estudiante José Martí Pérez. Entre el 25 y 27 de junio, aprueba los ejercicios de grado de Bachiller en Artes, y el 30 de junio obtiene el grado de Licenciado en Derecho Civil y Canónico.

Apenas dos meses después, el 31 de agosto del mismo año de 1874, el Apóstol de Cuba matricula en la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad de Zaragoza; median sólo 54 días para que el 24 de octubre, alcanzara el grado de Licenciado en Letras y Filosofía.

Otros detalles de Martí estudiante.

Son significativos pormenores del relato anterior.

Cuando en junio de 1874 se presenta a exámenes, realiza con excelencia dos ejercicios para el grado e Bachiller en Artes, título que no le fue entregado debido a que no contaba con el dinero para pagar esos gastos.

El examen que realiza satisfactoriamente el 30 de junio como aspirante al grado de Licenciado en Derecho Civil y Canónico, se efectúa de forma oral. Debió elegir una tarjeta y desarrollar la pregunta “Párrafo inicial del libro primero título segundo de la Instituta de Justiniano. Del derecho natural de gentes y civil”

También por el mismo método procede a su examen para el grado de Filosofía  y Letras, el 24 de octubre del mismo año, cuando saca a suerte el tema “La oratoria política y forense entre los romanos. Cicerón como su más alta expresión: los discurso examinados con arreglo a sus obras de Retórica”. Los profesores que le examinaron calificaron de brillante su exposición y le otorgaron la nota de sobresaliente.

Quienes le conocieron de cerca aseguran que José Martí Pérez, leía mucho y de todo y estudiaba constantemente. La cronología anterior lo demuestra. Su capacidad de autodidacto le brindó la posibilidad de hacer todo sus estudios frente a los profesores en breve tiempo, lo demás, aprehenderse de los conocimientos, fue obra de su férrea disciplina, la fortaleza de voluntad y tesonera disposición de buscar y encontrar sus objetivos.

Es cierto que se trata de una excepcional inteligencia, sin embargo, para las personas comunes se pueden extraer lecciones válidas: disciplina, voluntad, tesón y objetivos bien trazados desde el yo interno. He ahí la esencia de la cultura y la enseñanza para una conducta martiana a seguir.



[1] Hidalgo Paz, Ibrahím, “José Martí cronología 1853-1895”, Editorial de Ciencias Sociales, La habana, 1992)

Ser patriota de Cuba

Ser patriota de Cuba

Monumento a José Joaquin Palma en Bayamo

 

Joel Lachataignerais Popa    jlpopa@enet.cu    joecklouis@gmail.com

 

Los cubanos tributan profundo honor a Francisco Vicente Aguilera, en ocasión del aniversario 193 de su natalicio (Bayamo, 23 de junio de 1821).

Fue de los primeros conspiradores cubanos contra el dominio del colonialismo español, que mantuvo en cadenas de esclavitud a Cuba desde que en 1492 llegó a estas tierras, hasta que en el Siglo XIX, se generaron las guerras de independencia que abrieron camino a la derrota de España por el Ejército Libertador.

En Bayamo, la ciudad Monumento Nacional de Cuba, se forjaron las intenciones de combatir el colonialismo, cuando se constituye el primer núcleo rebelde, entre cuyos líderes figuraba el más grande acaudalado del Oriente cubano de la época, Francisco Vicente Aguilera.

Amigo del principal líder de aquel movimiento, Carlos Manuel de Céspedes, otro bayamés, abogado de profunda formación intelectual y política, Aguilera se vinculó estrechamente a la causa y entregó a ella todo su dinero, para lo cual se deshizo de sus propiedades.

Fue enviado por Céspedes a los Estados Unidos, donde comprobó que los gobernantes de aquella nación, no estaban interesados en apoyar y reconocer la lucha contra España.

Permaneció en Norteamérica, en su labor de lucha por la independencia cubana y allí falleció, solo, empobrecido y honorable. Su dignidad se alza hoy como bandera y símbolo de ejemplo.

Ser patriota en Cuba, ha sido y es, una conducta basada y regida por principios éticos, sustentados en el amor a la tierra en que se nació y que necesariamente no tienen que estar expresados en ley alguna.

Son principios manifestados desde las primeras rebeliones, como la del Cacique Hatuey, aquel legendario rebelde nativo de Santo Domingo, quien brindó su vida a la libertad de Cuba e indicó a los nativos de esta Isla que quienes acababan de llegar, eran esclavistas, y por ello fue quemado vivo.

Pudiera decirse que Hatuey fue el primer patriota cubano, como también puede decirse que fue el primer internacionalista.

A esa conducta se unen quienes años mas tarde contribuyeron con sus estudios y combate a la forja de la nacionalidad cubana, en el ejercicio de las ideas y el pensamiento y en la concreción del Ejército, que desde 1868, hasta 1898, combatió derrotó a España y fue traicionado por el Ejército de los Estados Unidos, distorsionando los propósitos nobles de hombres como Francisco Vicente Aguilera.

Ser patriota cubano ha sido y es mantener una conducta ética de amor a la patria, sostén de defender los principios de la Patria y, estar dispuestos a los sacrificios necesarios por hacerla feliz y vivir abrazados a esa bandera.

Hombres hay registrados en la Historia de Cuba, cuyas biografías ofrecen suficientes argumentos para escribir un profundo estudio de axiología del patriotismo.

El periódico de los jóvenes en Cuba, Juventud Rebelde, publicó en su edición del domingo 22 de junio de 2014, una entrevista de la periodista Yisel Rodríguez Milán, bajo el título de “Las fronteras simbólicas del patriotismo”, en la cual el joven Doctor en Ciencias Históricas, Elier Ramírez Cañedo, analiza el concepto de patriotismo y define ideas que merecen estudio.

Cuando los bayameses, a nombre de Cuba, tributaron este 22 de junio el merecido homenaje a Francisco Vicente Aguilera en el parque donde descansan sus restos, “El Retablo de los Héroes”, toda su luz extendió el fulgor de vigencia del concepto martiano de Patria en un ideal de conducta para ser patriota de estos tiempos. 

 

Brigada José Marti por diez años de vida

Joel Lachataignerais Popa  jlpopa@enet.cu   joecklouis@gmail.com

 

En octubre venidero cumplirá diez años de vida la Brigada de Instructores de Arte « José Martí”, creada por iniciativa del Comandante en Jefe de la Revolución cubana, Fidel Castro Ruz.

A ese empeño dedicarán sus esfuerzos los jóvenes brigadistas martianos de los ocho municipios de la provincia cubana de Las Tunas (670 kilómetros al este de La Habana). Durante dos días los principales líderes de la Brigada José Martí analizaron sus planes territoriales y locales hasta el fin de año, con énfasis en realizar una jornada de arte, cultura, solidaridad y alegría, en el mes de octubre en todos los municipios con un festival en la capital provincial.

Como sustento del soporte metodológico de las tareas que realizarán en esta etapa, se desarrolló un diálogo entre la dirección provincial de la Unión de Jóvenes Comunistas, profesores de la escuela Provincial del Partido Comunistas de Cuba “Jesús Suárez Gayol”, funcionarios del Ministerio de Cultura en la provincia y la Filial Provincial de la Sociedad Cultural José Martí. 

Todo cerró en la sede de la Unión de Arquitectos e Ingenieros de la Construcción en Las tunas, donde se presentaron valores de la música, el canto, el teatro y las tradiciones culturales, en un espectáculo que cerró con optimismo las horas de trabajo en un momento de satisfacción humana y espiritual.

La Filial Provincial de la Sociedad Cultural José Martí en Las Tunas, crea condiciones para vincular acciones a este importante aniversario.

Periodismo cubano desde la Historia

Periodismo cubano desde la Historia

Natasha Díaz Bardón hizo importantes revelaciones

 

Joel Lachataignerais Popa jlpopa@enet.cu  joecklouis@gmail.som

 

Cada año en el mes de mayo los periodistas tuneros realizan su encuentro científico sobre la historia de la prensa en el territorio. Esta vez, dedicado al 155 aniversario de la fundación del periódico local “El Hórmigo”, se presentaron nueve ponencias.

El Historiador de la ciudad de Las Tunas, master Víctor Manuel Marrero Zaldívar, en conferencia inaugural reveló interesantes detalles sobre la historia del periodismo tunero y en particular desentrañó elementos vitales  sobre el primer periódico de la localidad, “El hormigo”, cuyo 155 aniversario se recuerda este año.

Maira Castro Lora y Ada Cristina Higuera Tur, ofrecieron una reseña sobre el libro ”Elogio a la Memoria”, del cual ambas son autoras, donde se refieren a las historias de vida de los periodistas tuneros Gilberto E. Rodríguez y Rafael Zayas y significaron que estas son dos figuras mal tratadas en la historiografía local y de las que aún falta mucho por decir.

La novel Natasha Reyes Escobar, desde la estatura de recién graduada, se refirió al contenido de la tesis que presentó para obtener el título de Licenciada en Periodismo en la Universidad de Santiago de Cuba, “Literatura y Periodismo vs Literatura en la Gaceta de Cuba”, que resulta un estudio de primer orden sobre el periodismo cultural en Cuba, válido para darle continuidad teórico práctica.

“Rossano Zamora Paadín (Gallo): El decano”, fuel título presentado por el licenciado Nelson Marrero Pupo, para destacar facetas poco divulgadas de la vida del notable periodista, quien llegó al territorio tunero procedente de Villa Clara y alcanzó celebridad en el oriente cubano, específicamente en Las Tunas.

La vida sintetizada de un prominente profesional tunero de la prensa fue el material presentado por Gianny López Brito, quien bajo el título “Desafío a la utopía”, presenta los avatares de Juan Emilio Batista Cruz.

La joven varias veces premiada internacionalmente, Yetel Ricaño Noguera, llevó al plenario un tema del periodismo digital titulado “Sucede acá… entre ellas y ellos. Un blog sobre género en la blogosfera de Las Tunas”, de indudable valor para el desempeño de esa especialidad y con alta pertinencia para seguimiento. 

Un pormenorizado estudio sobre la “Influencia de Radio Chaparra en el desarrollo sociocultural” fue el tema del periodista Yoanis Fernández Echavarria, quien destaca en su investigación resultados del trabajo que realiza la emisora comunitaria en apenas diez años de existencia.

Con una sugerencia para escribir en profundidad sobre la vida de un importante periodista que se radicó en Las Tunas y falleció en Camagüey, disertó el master Rafael Labrada Díaz, con el tema “Florencio Lugones Andrés en el periodismo radial tunero”

“Voces de victoria”, fue la ponencia presentada por la laureada investigadora Natasha Díaz Bardón, revelando la existencia de un apreciado caudal de cultura e historia local en la revista de corte religioso “Victoria”, de la cual lleva a cabo un seguimiento de profusión necesaria para la localidad y para el periodismo en particular.

Durante el debate reestablecieron criterios acerca de la importancia de continuar investigando sobre todos los temas, pero se puso énfasis en buscar cómo registrar estos textos de modo tal que puedan socializarse en el territorio tunero y en incorporar más profesionales a esta tarea de valor incalculable para el desarrollo de la profesión en el futuro.

La presentación de la joven Natasha Reyes Escobar, que intituló “Literatura y Periodismo vs Literatura en la Gaceta de Cuba”, en nuestro juicio fue de lo más sobresaliente en el evento, pues puso el dedo en un aspecto poco trabajado por las investigaciones periodísticas, al extraer de la publicación de la Unión Nacional de Escritores y Artistas de Cuba (UNEAC) ejemplos de cómo incorporar la literatura al periodismo y a la vez integrar ambas esferas del quehacer social en función de informar y analizar a la vez.

En esta ponencia lo relevante se manifiesta en descubrir elementos vitales del periodismo cultural que apenas se asumen y, un modo de buscar soluciones a los problemas que presenta el periodismo cubano en el ejercicio de la critica artística y literaria, junto a definiciones muy concretas sobre los conceptos de cultura y periodismo cultural.

El jurado integrado por los master, Eduardo Garcés, profesor de la Universidad de Ciencia Pedagógica “Pepito Tey”, de Las Tunas; Rosa Velázquez Pérez y Robiel Proenza, ambos de la Unión de Periodistas de Cuba, valoró la necesidad de proteger el evento periodístico tunero con una mejor definición en sus bases, buscando más concentración en los preceptos medotológicos en función de la profundidad temática y la uniformidad de los exponentes.

Nelson Marrero, con la ponencia sobre Rossano Zamora Paadín, recibió mención; el tercer lugar se otorgó a Rafael Labrada Díaz, por su investigación relacionada con Florencio Lugones Andrés; el segundo lugar se entregó a Natasha Díaz Bardón, por la investigación sobre la revista tunera “Victoria” y el primer lugar fue para Gianny López Brito, con su testimonio dedicado a Juan Emilio Batista Cruz.

La Presidenta de la Unión de Periodistas de Cuba en las Tunas, master Adalys Ray Abines, convocó para la versión del evento científico Historia de la Prensa Las Tunas 2015.

 

 

 

Un recuerdo de Luis Carbonell

Un recuerdo de Luis Carbonell

 El fundador de la narración oral en uno de sus últimos actos


Joel Lachataignerais Popa  jlpopa@enet.cu  joecklouis@gmail.com

 

Ha fallecido Luis Carbonell, “El acuarelista de la poesía antillana”.

Recuerdo que en mi niñez, muchas veces de la mano de mi papá, iba trajinando las calles del barrio de Santiago de Cuba, donde él nació y vivió. Allí cerca de su casa natal estaba la humilde vivienda donde vio la luz Luis Carbonell.

Muchas anécdotas de su infancia me contaba papá, vivencias de aquellos niños de la época, que en oportunidades los reunió en juegos de calle, aunque recordaba que apenas podían ver al pequeño tocayo, siempre resguardado en su casa, bajo el manto de mamá.

Con  esos recuerdos crecí y un día –años más tarde- nos detuvimos en la puerta de su casa. Papá saludó y me dijo que esa era la casa de los Carbonell. Vi  -desde lejos- la sala modesta y en la pared del fondo una fotografía de gran tamaño reproduciendo al artista en plena faena profesional.

Me acostumbré a escucharlo por la CMQ y después por Radio Progreso y en la televisión. Resultaba grato, divertido, saludable escucharlo en aquella metamorfosis verbal, que pasaba de narrador a personajes, diversos personajes: Un negro, un bien hablado, un mal hablado, una mujer, un esclavo, un policía, un pregonero, un cantante o una cantante, un uno o un una… así era el estilo que viví de Luis Carbonell.

Y recibí muchos mensajes de alto valor humanístico, cultural, histórico…Arturo Liendo, Nicolás Guillén, Enrique Núñez Rodríguez y otros relevantes de la poesía cubana y universal, fundamentalmente caribeña, llegaron a mi acervo gracias al decir de Carbonell por radio, televisión o un teatro…

Una vez se anunció su presencia en Bayamo. Actuaría en el Teatro “Estrada”, - hoy “Céspedes” - situado frente al parque central de la ciudad monumento.

Era el mediodía. Como la emisora de radio, -CMKX-, estaba en los altos de aquel teatro, yo tenía que atravesar el parque para dirigirme a sus estudios. Allí mismo, cuando iba próximo a la glorieta, donde se alza el monumento al Padre de la Patria, venía Luis Carbonell, en sentido contrario, llevando al hombro unos percheros con sus trajes de “acuarelista”.

Me adelanté.

- Con permiso. Soy periodista. Mi nombre es Joel Lachataignerais Popa.

Él respondió a mi saludo dándome la mano. Y hasta se detuvo para escucharme. Le hice unas preguntas muy sencillas requiriendo información sobre lo que haría en el recital de la noche. Después le dije quien era mi padre, (Luís Felipe Lachataignerais Calderín) y él me miró con un gesto de infantil alegría y reconocimiento.

- ¡Ah sí! ¡Luisito! ¿Qué es de él?...

- Él le recuerda mucho y seguramente vendrá a verle…

Y muy brevemente le hablé de mi padre cuando ya era un maestro jubilado.

    - Dile a Luisito que será un  placer que venga a verme al Teatro. Que nunca he olvidado a mis amigos de la infancia.

 

Después de los aplausos me quedé esperando el encuentro entre mi papá y Carbonell. Lamentablemente no se produjo, pero nunca olvidé ni olvidaré este momento.

Una mamá cubana en camino de los cien

Una mamá cubana en camino de los cien

El lozano rostro de la mamá cumpleañera

 

Joel Lachataignerais Popa jlpopa@enet.cu joecklouis@gmai.com

 

Mayo es un mes mágico para mi vida. Muchas cosas agradables han sucedido para mí en esta etapa del año. Pero el más grande de todos es aquel que se fija cada día 23 de mayo, que me permite recordar que en el año de 1923, ese día, nació Julia Zenaida Popa, mi cariñosa y distinguida madre.

Es muy difícil encontrarse una madre que no sea cariñosa. Todas prodigan a los hijos ese sentimiento que siembran en lo más profundo de su ser y lo hacen crecer en idea y práctica.

Mi mamá, Zenaida, como más bien todos la conocen, -sin el Julia de adelante- es una persona sana, dueña de sí misma, con un carácter de profunda bondad y un vestigio de inteligencias morales que asume con fortaleza y rectitud. Mis hermanos y yo la adoramos y mimamos, cada cual a su modo. Sobre todo las hembras. Y es porque de ella aprendimos a hacernos de una vida limpia, tradicional y severamente ética.

Edel, que es para su orgullo cardiólogo en el Hospital Lenin de Holguín, tiene a su cargo su salud –como tuvo la de papá-. “Cuiden a Zeni, nos dice”. “No dejen que Zeni camine mucho, pero tampoco la dejen estancada”.

Y cuando sus energías descargan sentimientos de crítica por algo que ella entiendo que está mal, Edel nos dice: “Háganle caso a Zeni…”

Isel, profesora de Biología retirada ya hace algunos años, es la más pequeña de los cuatro hijos de Zenaida y Luis Felipe. Desde la década de los años 1960, Isel vive en La Habana. Ella es tal vez, entre nosotros, la que más le malcría.

Enérgica como la madre, sabe ponerle coto a las cosas y destina para mamá Zenaida (Zeni, como le dice Edel) el mas grande de los cariños. Dubel, es la hermana que permanece con mamá en su casa de Bayamo.

Ella ha vivido toda la vejez junto a la ilustre madre, con su hijo Lester y el nieto Raymon. Es Dubel quien le escucha todos los lamentos, alegrías, consejos y chistes… Es Dubel quien carga todo el peso de las edades de mamá.

Hay otros nombres que se incorporan: Yolanda, la hermana de todos, mayor que yo, quien vive en Santiago de Cuba con esa otra parte de la familia Lachataignerais. Yola, desde su distancia envía mensajes de amor hacia Zenaida, como ella le proclama y como no le puede visitar sistemáticamente, usa el teléfono para saber de ella…

Las hijas de Edel, Sussette, Roxana, Edelvis y Edelsis, le acarician enviándole siempre el cariño que primero fue sembrado en ellas. Berta y Amelia, otras hermanas de crianza, aquellas que nos alimentaron y cargaron en la niñez, porque son mayores que todos, sienten hondo el amor que prodigó Zenaida.

Por eso – a iniciativa de las hembras – y entre todos, el pasado 2013 se armó una fiesta familiar con motivo del 23 de mayo… y hubo dulces, refrescos, vinos, un bello cake, música, juegos, acertijos, palabras y regalos… La iniciativa vinculó a todos: Eran los 90 de mamá.

Ahora comienza el avance de mi mamá, nuestra mamá, por el sendero de los cien años, al amparo del querer de todos, para conservarla con el intacto e indeleble rostro que se aprecia en la fotografía.

Yo, miro con admiración la firmeza de mamá; una mujer con intelecto de escritora y poetisa; quien quiso una vez ser locutora, y se hizo profesora de corte y costura para hacernos las ropas con que fuimos de paseos infantiles y de adolescentes e impulsó mis días de militar, de combatiente internacionalista y cada día en mis misiones como periodista y hombre de bien…

Que dio pasos invariables a la conducta de cada cual: en Isel, para ser profesora de Biología; en Dubel para su título de profesora de Química y Física, en el médico cardiólogo Edel y en el periodismo de mis sentimientos.

Así todos: hijos, nietos y biznietos, alzamos la alegría en una imaginaria copa para asomarnos a éste, el camino de los cien de mamá Zenaida, o más lindo todavía: Zeni, como amorosamente dice Edel.

Animación y promoción sociocultural en bibliotecas cubanas

Animación y promoción sociocultural en bibliotecas cubanas

En el rostro de ella se aprecia el entusiasmo reinante

 

Joel Lachataignerais Popa   jlpopa@enet.cu  joecklouis@gmail.com

 

Curioso, interesante e importante fue apreciar que en un curso que realiza el sistema provincial de bibliotecas públicas de Las Tunas, el alumnado esta integrado por muchachas que guardan edades no más allá de 35 años y escasos 19 en el mínimo.

Era la evaluación correspondiente a las acciones que deben ejecutarse en la Biblioteca para promover la presencia de lectoras y lectores en las salas, y actividades para incentivar la animación sociocultural en torno a esas entidades de la cultura.

Las muchachas presentaron ante el tribunal que evaluaba la asignatura numerosas iniciativas, para informar y atraer a los lectores.

Presentar libros de los que se cuentan como fondo bibliotecario, resultó una muestra agradable, por la significación de que las presentadoras, a fuer de bibliotecarias, mostraron dominio de la técnica y también del texto presentado.

En esta modalidad vimos presentar libros con demostraciones de la utilidad que contienen los textos para el posible lector y, desplegar las ideas de algún texto ante la presencia de los autores, para posteriormente, en una entrevista con público asiduo de la institución, entregar la vida y la obra del escritor a los clientes de la biblioteca.

Vimos la cotidianidad cubana en aquella muchacha que se mostró desde la pícara imaginación del cubano, en el uso de acertijos y comidas de meriendas incentiva a la lectura en animación sencilla y popular,  apoyada también en el pregón y el humorismo.

La otra que peine o tijeras en manos proporciona el arte de peinar o recortar el cabello, como premio a sus convocatorias de lectura y la jovencita que como sorpresa llevó su concepto de que a los niños y jóvenes se les puede llevar a la biblioteca con una demostración del tema que está en un libro y lo demostró con la magia como temática de lectura y la actuación de un mago en el acto de presentación del libro.  

O aquella joven que aparece en la foto, elaboró con ramas de racimo de coco un arbolillo, de donde penden tarjetas manufacturadas donde aparecen propuestas de interesantes lecturas en preguntas que el público asistente deberá responder y con ello ganar el derecho a escoger un libro cuyo contenido ha sido referido en interrogante.

Fue, curioso, por lo novedoso que resultan las ideas desarrolladas para acercarnos a la lectura en bibliotecas;  interesante porque en conversación con ellas supimos que no es un hecho que se motivó sólo para  el cierre de un curso, sino es una demostración de las cosas que ellas hacen en su labor de promoción y animación cultural en la biblioteca, e importante, porque en ellas se fija de este modo una modesta contribución a la cultura desde ángulos diversos.